Los franquicias lamentan que se deje la comunicación en un segundo plano
Las franquicias son un sector que se ha mantenido al alza en nuestro país pese a la crisis, ya que permite al emprendedor lanzarse al autoempleo pero de una forma guiada. Según datos de la Asociación Española de Franquiciadores, en estos momentos existen 1.040 negocios de este tipo en España que aglutinan unos 59.000 locales.
No obstante, este mercado presenta algunos puntos débiles en el terreno de la comunicación y el marketing que ralentizan su crecimiento. En cuestión de inversión, se calcula que un 80% del total se destina al acondicionamiento del local y el 20% restante es para cubrir otro tipo de gastos como puede ser la promoción del local, un porcentaje que resulta insuficiente.
Las agencias de comunicación explican que el mundo de la franquicia aún no ha explotado comunicativamente, ya que muchas no comunican sus aperturas, ni el lanzamiento de nuevos productos perdiendo así competitividad y clientes potenciales.
Los propios franquiciados admiten que a veces se sienten invisibles y que desde la matriz se debería coordinar y dirigir una acción comunicativa de la marca de forma constante y regular y no relegar estas estrategias a un segundo plano.
Salir en los medios de comunicación sin duda ayuda a mejorar la visibilidad de un negocio, le aporta credibilidad y notoriedad, pero en el caso de las franquicias no es la comunicación externa lo único que falla. Los franquiciados explican que de forma interna se producen lagunas informativas que les hace sentirse desamparados y algo perdidos, sobre todo en lo que respecta al tema de los beneficios económicos.
Más apoyo y formación
Hay otro aspecto que preocupa al franquiciado y es la formación. Muchos lamentan que la central sólo les oriente antes de la apertura y de lo haga de forma fugaz, cuando lo ideal sería que el apoyo no se centrase sólo al momento previo a la inauguración sino que se mantuviera a lo largo de toda la vida del negocio, favoreciendo el reciclaje del emprendedor.
Ante esta situación la mayoría de franquiciados explican que no les queda otra que aprender de forma autodidacta, lo que conlleva errores que a su modo de ver serían fáciles de evitar con una formación previa.
Ventajas
Estos serían los puntos claves que el sector de las tiendas en cadena debería mejorar, pero existen otros muchos factores que hacen de este modelo una buena alternativa para emprender. Uno de ellos sería la seguridad de abrir un local bajo el paraguas de una marca conocida y que ya se ha hecho un hueco en el mercado. También cabe destacar la comodidad que disponen a la hora de negociar con proveedores y que tienen todos los aspectos de creación de marca y diseño de interiores cubierto.