Cambia tu estrategia y aumenta tu visibilidad sin arruinarte en el intento
por Redacción
en Buenas prácticas
Existen muchas formas de darse a conocer, desde aparecer en los medios de comunicación, hasta apostar por las redes sociales, pero lo que no pueden pretender las empresas es intentar conseguir clientes si nadie sabe de su existencia.
Una de las fórmulas más habituales para promocionarse es apostar por la publicidad, pero este es un gasto que startups, emprendedores y pymes no siempre pueden permitirse. Por suerte las nuevas tecnologías han permitido democratizar el mercado, permitiendo que todas las marcas tengan su minuto de gloria, independientemente de su tamaño o recursos.
Seguidamente vamos a dar una serie de consejos para ganar notoriedad sin necesidad de arruinarse en el camino:
-Revisa tu estrategia de comunicación. Hay que analizar qué ha funcionado hasta ahora y qué no. Esto servirá para diseñar un plan de comunicación nuevo y asegurarnos de que va enfocado a nuestro target y a sus necesidades. Para no dar palos de ciego si se carece de formación en este tema, es recomendable contar con una agencia de comunicación que se encargue de crear la hoja de ruta a seguir e implantarla. En este sentido es importante que la agencia tenga un tamaño similar al de la empresa, así podrá adaptarse mejor a su presupuesto y entenderá mejor sus limitaciones.
A las pymes les gusta hablar de tú a tú y tratar con empresas más grandes a veces les hace perder esa cercanía con la que ellas se encuentran tan cómodas, de ahí que las agencias de comunicación de menor tamaño acaben haciendo tan buenas migas con las nuevas marcas. Porque cuándo uno sale al mercado lo hace rodeado de miedos e inseguridades y necesita a alguien a su lado que le entienda y ¿quién mejor que otra empresa que ha pasado por sus mismas dificultades?
-Apostar por las redes sociales. En estos momentos parece que quién no tenga presencia en las redes no existe. Nos hemos acostumbrado a usar estas plataformas para buscar referencias e información y por eso esperamos que nuestras marcas estén ahí.
Las redes sociales ayudan a las empresas a atraer, fidelizar y conocer mejor a su público objetivo. Al fomentar la interacción se descubren muchas cosas de los usuarios y ello permite a las compañías crear campañas segmentadas en función de cada perfil de interés. En resumen estas herramientas acaban siendo algo más para las marcas que un gran escaparate dónde anunciarse o promocionarse, son un canal para recabar tendencias y llegar a su público objetivo.
-La efectividad del email marketimg. Enviar de forma periódica newsletters o boletines es una fórmula efectiva para meterse en la vida de los consumidores de forma no intrusiva. Eso sí, para no ser considerado un correo spam es necesario que los contenidos que alimenten estos documentos sean de calidad y aporten valor a su receptor. Nada de centrarse únicamente en reafirmar que somos los mejores o tenemos el mejor producto del mundo, hay que abrir el abanico y hablar sobre el sector, explicar experiencias en otros mercados, etc. El coste de una newsletter es bastante asequible y permite a las marcas mantenerse cerca de sus clientes.
-La importancia del SEO más allá de Google AdWords. Muchas veces las compañías tienden a dejar su posicionamiento en manos de AdWords y luego se llevan un susto cuándo revisan la factura. Existen otras formas de mejorar el SEO de forma natural y es apostando por los contenidos de valor e irlos renovando de forma regular.
-Una web corporativa debe ser viva. Estrenar una web y no volverla a tocar en meses es lo peor que se puede hacer. Estamos hablando del espacio oficial de una empresa y debe reflejar todos sus cambios, novedades, etc. Una web desactualizada afecta a la imagen de una marca y la aleja de sus posibles clientes.
Sin duda una buena comunicación permite atraer nuevos adeptos y mantener el interés de los ya conseguidos, pero es un trabajo que lleva tiempo, requiere de una estrategia y no acaba nunca.