¿Existe la fórmula mágica para conseguir hacer virales tus contenidos?
¿Os acordáis del vídeo viral «First Kiss»? En aquellas imágenes un grupo de desconocidos eran invitados a besarse, sin haber tenido contacto antes, para dejar constancia gráfica de un momento mágico como es la primera vez que besas a alguien. En poco tiempo esta producción registró más de 20 millones de visitas en Youtube, todo un récord que cualquier marca querría para sí misma. El problema está en encontrar la receta ideal para captar la atención de los usuarios y conseguir que se animen a compartir el contenido que has creado.
En social media no existen fórmulas mágicas pero sí algunas pautas que se pueden seguir y que dan muy buenos resultados. Por ejemplo en el caso del «Primer beso», tuvo un gran peso que las personas que lo protagonizaron eran anónimas y de características muy diferentes: había altos, delgados, morenos, rubios, cabello largo, corto, blancos, negros, etc. además representaba una situación que todo el mundo vive en determinados momentos de su vida, por lo que resultaba muy fácil identificarse con viendo el vídeo. Un requisito indispensable si lo que se quiere es tocar la fibra del espectador. Es cierto que contar con celebrities también puede ayudar a convertir en viral un determinado contenido, puesto que son capaces de crear tendencias y de arrastrar a una masa importante de seguidores, pero no siempre son garantía de éxito y no todas las marcas pueden permitirse contar con Messi, Adriana Lima o compañía.
Apelar a la emoción
Despertar sentimientos es el objetivo al que todo vídeo aspira a ser viral, da igual si son negativos o positivos, pero no pueden dejar indiferente. El problema es que el ser humano es imprevisible y además está marcado por sus propias vivencias, lo que implica que no todo el mundo se va a emocionar con los mismos argumentos y es que nadie dijo que hacer viral un contenido fuera fácil, pero tampoco es imposible. Por ejemplo, en Agenciasdecomunicacion.org sabemos que a la hora de compartir un artículo es importante cuidar el titular (sobre todo si aspiramos a hacernos un hueco en los medios de comunicación) y aportar datos únicos y relevantes y acompañarlos con información gráfica.
Mientras que en el caso de los vídeos el factor sorpresa también es un elemento muy importante porque suele generar una reacción que en la mayoría de los casos lleva a su viralización. Pero sin duda, lo que hay que tener claro es a quién vamos a dirigirnos, porque si no está definido el público objetivo el mensaje no será claro y no llegará de la forma deseada. La credibilidad de la fuente es sin duda otro valor añadido que favorece que un determinado contenido se comparta, así como un correcto etiquetado. Tras saber esto ¿tus vídeos cumplen estos requisitos?