La comunicación para empresas familiares
El tejido empresarial español se caracteriza principalmente por las PYMES y los autónomos. En España hay más de 3 millones de pequeñas y medianas empresas y gran mayoría de ellas son de carácter familiar. ¿Qué ocurre cuando hay que externalizar servicios?
Según ha podido comprobar Agenciasdecomunicacion.org en sus más de 3 años de experiencia, a las empresas familiares les cuesta externalizar servicios y esta preocupación se agrava cuando se trata de comunicación, de ceder el control de su imagen a tercero. Sin embargo, esta decisión en la mayoría de los casos se presenta como necesaria por dos motivos: no hay ningún miembro de la familia con conocimientos en comunicación y su imagen se está viendo perjudicada por estar gestionada por personas no cualificadas.
La comunicación y la imagen corporativa es un pilar clave para llegar al público, mejorar el posicionamiento y crear una marca potente frente a los competidores. Para obtener de ese trabajo un óptimo resultado se hace imprescindible ponerlo en manos de profesionales de la comunicación que saben diseñar un plan y una estrategia para conjugar las distintas herramientas y crear los mensajes más adecuados.
¿Cómo vencer el miedo?
Vencer el miedo a poner esta parte de la empresa en manos de alguien que no sea de la familia, es primordial. Para ello, lo más adecuado es encontrar una agencia o equipo de profesionales en los que se confíe y que pueda garantizar ciertos resultados. Para ello el sector está muy diversificado y podemos encontrar agencias especializadas en distintos sectores y de muchos tamaños.
Hay familias que prefieren agencias grandes, con equipos numerosos y que ofrecen un amplio abanico de servicios. Otros prefieren agencias pequeñas y familiares como sus empresas en las que el equipo es más reducido pero ofrecen un trato más personal y cercano. En ambos caso, lo importante es que el servicio se adapte a las necesidades de la empresa y también al presupuesto, pues no es efectivo elegir servicios que no nos podamos permitir y en un par de meses tener que interrumpirlos.
¡Qué todo quede en familia! ¡Sí! Pero a veces la familia tiene que aumentarse o contar con ayuda externa para conseguir los mejores resultados.