La importancia del 2.0 en comunicación
por Redacción
en Buenas prácticas
La Era Digital ya está totalmente instalada y desde hace unos años vamos a más. Hemos pasado de tener internet en casa y la oficina a llevarlo en el teléfono móvil y de conectarnos para ver el correo electrónico a consumir televisión y cine en nuestro dispositivo. Sin embargo, hay empresas que, aunque creen en el poder de la comunicación como herramienta estratégica para mejorar su imagen y reputación, carecen de formación y experiencia especialmente en el ámbito 2.0.
Lo más difícil es inculcar actitud y valores 2.0. En Agenciasdecomunicacion.org nos preguntamos, ¿cuántos profesionales de la comunicación, con años de experiencia, conoces con carencias digitales? ¿cuántas empresas u organizaciones recelan de toda novedad, incluso en comunicación?
Las redes sociales, las aplicaciones, las app de mensajería instantánea, los blogs, etc. ofrecen excelentes oportunidades de comunicación y cada cual tiene un propósito determinado. No obstante, en muchas ocasiones no hacemos un buen uso de estas herramientas, pues confiamos en ellas como sustitutas de nuestra propia incapacidad para adaptarnos a los cambios. Debemos salir de este error, las herramientas no trabajan y consiguen objetivos por sí solas sino que tenemos que aplicar nuestros conocimientos y experiencias para sacarles el máximo rendimiento.
Las nuevas tecnologías son un canal más para conseguir hacer llegar nuestros mensajes pero detrás tiene que haber una estrategia y un trabajo previo basado en la experiencia profesional y en conocimientos de comunicación. La formación continua es un elemento indiscutible. Estar al día nos permitirá aplicar y adaptar nuestros conocimientos y experiencias al entorno cambiante de la Era Digital.
Además, la formación nos ayudará a sacar el máximo partido de cada herramienta a nuestro servicio. Un buen ejemplo es el Big Data, tan novedoso que apenas intuimos sus posibles aplicaciones pero que nos apresuramos a abrazar como solución a muchos de nuestros males.