Los cavas no catalanes son los que más crecen
El consumo de cava en España llevaba 7 años cayendo en picado, pero en 2015 la tendencia está cambiando. Según el Consejo Regulador del Cava, las ventas en el mercado interior aumentaron en el primer semestre del año hasta un 9%, una buena cifra si se tiene en cuenta la trayectoria anterior del espumoso español.
Tanto los cavas aragoneses como extremeños llevan varios años aumentando sus ventas en el mercado interior, donde reconocen que el conflicto catalán les ha beneficiado, así como en el exterior, donde experimentan un importante proceso de internacionalización.
Los cavas de Aragón y Extremadura siguen creciendo en España
Los productores de Aragón esperan que sus cavas mantengan esta tendencia al alza. Meritxell Villas, responsable de AragonMeGusta.com, reconoce que los espumosos aragoneses están ganando cada vez más un mayor reconocimiento frente a los catalanes, que hasta hace unos años acaparaban toda la fama. César Langa, de bodegas Langa, una de las más activas de la región, asegura que la demanda a nivel nacional está creciendo por encima de la media a la que hace referencia el Consejo Regulador. “Nosotros en España estamos creciendo más del 1%. Entre el conflicto catalán con las recientes elecciones autonómicas, y que la temporada de cava cae en plena campaña electoral… creemos que vamos a tener una muy buena producción”.
Villas asegura que la demanda de cavas aragoneses aumenta cada año y con ella la producción. Todos los proveedores cuentan con que la campaña sea especialmente intensa. En bodegas Langa, por ejemplo, han producido unas 600.000 botellas frente a las poco más de 400.000 del año pasado y entienden que los demás proveedores de la zona, quedan pocos ya, estarán viviendo algo similar. “Vamos a superar con creces lo del año pasado”.
Respecto a la a capacidad de producción y distribución del cava extremeño, también crece a velocidades de vértigo: un 23% el año pasado. De 2,8 millones de botellas que sacaron en 2013 a más de 3,6 millones en 2014. Y la tendencia se mantiene este año según Leonard Pera, fundador y gestor de la web gastronómica TodoExtremadura.com. De hecho, en las bodegas Vía de la Plata, la más antigua de la región y primera extremeña en conseguir la denominación de origen Cava, este año han producido medio millón de botellas, 100.000 más que el pasado, según su gerente Evaristo de la Vega. Y es que, de acuerdo con sus cálculos, esperan llegar a vender un 15% más que el año pasado.
Al igual que con los cavas aragoneses, este incremento viene muy marcado por la realidad política del momento. El conflicto catalán va a beneficiar, según estiman los proveedores, a los cavas no catalanes, explica Pera. Los cavas extremeños cuentan con salir bien parados de esta situación puesto que en los últimos años han logrado cierto reconocimiento en España y cuentan con un mercado consolidado. Ahora esperan crecer. Evaristo de la Vega asegura que ya están ganando mercados nacionales que antes eran consumidores de cava catalán.
La internacionalización de los cavas no catalanes
Respecto al mercado internacional, el cava español también ha experimentado una leve recuperación. Ha llegado a crecer un 1% con respecto al mismo periodo del año pasado. En 2014 se produjeron en nuestro país más de 242 millones de botellas de cava. De ellas, una cuarta parte fue comprada por los dos países que más cava consumen actualmente: Alemania, que compró casi 30,5 millones de botellas, y Bélgica, con más de 30,4 millones de botellas.
Sorprendentemente, la mejora del mercado exterior está motivada por países como Francia, tradicionalmente consumidor y productor de champagne, donde se ha incrementado el consumo del espumoso español en un 12%. También gracias al incremento del consumo en otros países, como Canadá, donde el consumo creció hasta llegar al 16%, y Estados Unidos donde lo hizo hasta el 15%, convirtiéndose este último en el cuarto mercado mundial para el cava.
Este crecimiento está potenciado, según el propio Consejo Regulador, por los cavas de alta gama. Así, los de Reserva han aumentado un 11,7% con 9,39 millones de botellas, y los Gran Reserva un 22,6%, con 1,85 millones de botellas. La mayor parte del crecimiento experimentado en las ventas procede de la distribución tradicional: restaurantes, tiendas especializadas y hoteles.
ASí, y más allá del conflicto catalán, Meritxell Villas destaca la internacionalización de los cavas aragoneses, como el Reyes de Aragón, de bodegas Langa, que ya exporta el 95% de su producción. Y no sólo a Europa, sino también a todo el continente americano (Estados Unidos, Canadá y Latinoamérica), al australiano y, recientemente, al asiático, con la incorporación de un nuevo mercado: Japón. La aerolínea Japan Airlines Corporate (JAL) lo ha seleccionado para ser el espumoso de alta calidad que ofrecerá a sus pasajeros de clase preferente.
El crecimiento de los cavas extremeños se debe también a un proceso de internacionalización, explica Pera. Han conseguido traspasar fronteras. Se exporta cada año a más países, son ya decenas en todo el mundo,y tiene una fuerte y cada vez mayor presencia en mercados tan importantes como el de Estados Unidos o el de Japón. Lo bueno de estos mercados extranjeros es que allí el cava se consume todo el año. “El del cava siempre ha sido un mercado muy estacional y eso está cambiando gracias a la exportación”, remarca Evaristo de la Vega, gerente de bodegas Vía de la Plata.