Los terapeutas caninos, actores principales del bienestar de las personas
Para la depresión, la memoria y la presión arterial
Madrid, febrero de 2016.- La práctica de terapias con animales está cada vez más extendida en la sociedad para su aplicación en diferentes ámbitos, aportando avances y mejoras desde el punto de vista físico y psicológico de las personas con problemas de salud.
Para aquellas personas que sufren depresión o tienen la autoestima baja, para motivar o fomentar el contacto físico con terceros, para mejorar la concentración o trabajar la memoria. “Los perros son los animales adecuados para dar salida a estas situaciones porque sacan lo mejor de nosotros”, apuntan desde animalCLAN. Así mismo, los terapeutas caninos también tienen su protagonismo con ancianos y niños, pues como ya se ha demostrado ayudan a gente con Alzheimer o demencia y a jóvenes que sufran autismo, trastornos del desarrollo o mentales.
Obediente, adiestrado y tranquilo
El perro ideal para terapia tiene que ser obediente, tranquilo y estar previamente adiestrado. Del mismo modo que los que se encargan de encontrar explosivos, drogas, o víctimas bajo los escombros, lograr que un perro sea perfecto para hacer terapia con humanos también requiere adiestramiento. Los responsables de animalCLAN comentan que no deben lamer ni recoger cosas del suelo a no ser por indicación de una persona. El terapeuta canino puede trabajar en hospitales donde los contagios están presentes.
¿La mejor raza?
Labrador, Golden Retriever, Galgo o Poodle son algunas de las razas más adecuadas para realizar terapias con perros, de igual forma que con el pastor alemán o suizo. Pero lo que hay que tener en cuenta es que, aun siendo los mejores no significa que lo sea por naturaleza. Todo ellos requerirán un proceso de sociabilización para poder atender a las personas que necesiten de su ayuda.
Más información – animalclan.com