Uno de cada cuatro niños se ha perdido alguna vez durante las vacaciones
- La empresa Stikets ya ha vendido más de 43.000 pulseras identificativas para minimizar el tiempo y el riesgo de pérdida de los niños
Barcelona, 31 de mayo de 2016.─ Tienes a tu hijo al lado y, al cabo de un segundo, te giras y no está. Perder de vista a un niño, sobre todo en espacios públicos donde se concentran una gran cantidad de personas, es un mal trago por el que pasan muchos padres cada verano. Según un estudio realizado por la empresa Stikets, uno de cada cuatro niños se ha perdido alguna vez estando de vacaciones con la familia.
La mayoría de estas situaciones se dan en espacios con mucha gente. Según el estudio, el 58% de las madres encuestadas declara haberlos perdido en un centro comercial, un 16% en la playa, un 15% en un parque público y el 11% restante se reparte entre sitios como parques temáticos, aeropuertos, espectáculos y conciertos. De hecho, sólo la Cruz Roja atiende a más de 2.500 niños que se pierden en las playas de España cada año.
Generalmente, cuando un niño se pierde no sabe cómo actuar, y eso dificulta el reencuentro con los padres. Según el estudio, en la mayoría de los casos fueron ellas las que encontraron a sus hijos, pero con ayuda de trabajadores locales y personas de la zona. Por eso la Cruz Roja afirma que una pulsera identificativa es la forma más sencilla y eficaz para minimizar el tiempo y riesgo de pérdida de los niños, ya que estas contienen el nombre del niño y un teléfono de contacto de los padres. Así, cuando un adulto encuentra a un niño perdido puede avisar rápidamente a los padres para que lo vengan a recoger.
En los últimos años cada vez hay más padres que buscan y compran pulseras identificativas a través de Internet, ya que este medio facilita el hecho de pedir productos totalmente personalizados. Conscientes de esta realidad, la mamá y emprendedora Stephanie Marko incorporó hace dos años las pulseras identificativas en su tienda online Stikets.com
“El producto ha tenido muy buena acogida por parte de los padres y ya se han vendido más de 43.000 unidades. Estamos muy orgullosas de poder ayudar a otras madres con esta solución”, asegura Stephanie Marko, CEO de Stikets.com.
Las pulseras identificativas Stikets se pueden personalizar fácilmente con nombre, teléfono y con distintos colores y diseños en tan solo unos clics. Están hechas de material textil para que sean lo más cómodas y transpirables posible y son resistentes al agua. Disponen de un cierre permanente de seguridad que impide su apertura para que los pequeños no se la puedan quitar solos.
Además de las pulseras identificativas, la marca Stikets es conocida por sus etiquetas personalizadas para evitar que se pierdan la ropa, zapatos y todo tipo de objetos y complementos en la escuela, durante las excursiones o en otras actividades extraescolares.