Diseñar una filosofía corporativa a medida, la clave del éxito del emprendimiento femenino
Las nuevas tecnologías permiten al estudio de interiorismo Claaac ofrecer desde Barcelona y Paris un servicio internacional adaptado 100% a la identidad de sus clientes y a las necesidades de sus fundadoras
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Una parte de la sociedad mantiene el estereotipo del emprendedor como un hombre ambicioso que trabaja duro y de la emprendedora como alguien que trabaja por hobby si dedica menos tiempo o como ‘malamadre’ cuando trabaja demasiado. A pesar de los avances hacia la igualdad, las mujeres siguen superando barreras sólo por su género. Por ejemplo, la conciliación sigue teniendo nombre femenino y la maternidad se mantiene como un obstáculo en la carrera profesional de las mujeres. Desde su estudio de interiorismo y diseño Claaac, Aude Croiset y Céline Legros llevan dos años construyendo un proyecto de emprendimiento femenino desde sus sedes en Barcelona y París.
“Nunca es fácil emprender. Iniciar un proyecto desde cero conlleva muchas dificultades. Si ese comienzo coincide con la maternidad, las mujeres encontramos una gran barrera que debemos superar. Ese es nuestro caso, dos mujeres y madres que se lanzan al mundo empresarial. Contamos con más de 7 años de experiencia profesional pero aun así no nos libramos de las barreras impuestas por la desigualdad de género. Afortunadamente ambas tenemos una pareja que cree en nosotras y con quien compartimos la crianza, pero no todas las madres tienen esa suerte. Nosotras hemos creado un proyecto empresarial flexible que nos permite adaptar nuestros compromisos y tareas profesionales a nuestras necesidades personales. No obstante, el simple hecho de poder organizar libremente nuestro día no significa que siempre estemos disponibles. Tenemos nuestros horarios y responsabilidades tanto en lo profesional como en lo personal. Nuestra flexibilidad tiene sus límites: no podemos siempre ir al colegio, atender al de la compañía de teléfono o parar para un café”, explica Aude Croiset, dos años después de emprender Claaac.
Las nuevas tecnologías permiten a estas mujeres emprendedoras ofrecer desde Barcelona y París un servicio internacional sin renunciar a un trato cercano y personalizado. Tanto desde una oficina o desde el propio hogar, la digitalización facilita la conciliación familiar y que las mujeres sigan creciendo en el terreno profesional sin renunciar a la maternidad. La flexibilidad es un valor más para Claaac y su equipo. Contar con adaptabilidad para los horarios, localización, proyectos… permite que ambas madres puedan organizar y cuadrar las necesidades de sus vidas profesionales y familiares.
“Creamos Claaac de una forma muy consciente, el objetivo era ofrecer un servicio de calidad que se adaptara a nuestras necesidades como profesionales y madres. ¡Lo hemos conseguido! Igual que nuestro diseño se centra en la identidad de nuestros clientes, nuestra filosofía corporativa se basa en nuestro lifestyle. Gracias a la versatilidad que hemos dado a la empresa, hemos logrado que nuestros proyectos sean reconocidos por nuestra profesionalidad sin tener que renunciar a la familia y la maternidad”, asegura Céline Legros, cofundadora del proyecto.
Adaptabilidad
Los proyectos de Claaac se adaptan 100% a la identidad y personalidad de cada cliente, ya se trate de diseñar viviendas o espacios comerciales. Su filosofía corporativa se centra en crear ambientes a medida que se adecuen a su ubicación. Unos valores en consonancia con la flexibilidad que la compañía ofrece a sus fundadoras para facilitar su labor como mujeres emprendedoras y madres.
Desde sus inicios en 2018, apuestan por la sostenibilidad así como por materiales naturales, como la madera, y artesanales, como la cerámica. El punto de partida de cada proyecto es el blanco como lienzo desde el que comenzar a construir una idea. Claaac ofrece una amplia gama de servicios que se ajusta a todo tipo de clientes y necesidades. Sus fundadoras defienden un servicio de interiorismo al alcance de todos los proyectos, son partidarias de detallar y explicar al máximo su trabajo para que el cliente entienda la propuesta y pueda elegir.
Desigualdad según sectores
El interiorismo se mueve dentro del sector de la construcción, un mundo principalmente de hombres al que, como mujeres, a veces les cuesta llegar. “El interiorismo va mucho más allá de la decoración. La decoración es una mínima parte, trabajamos aspectos mucho más técnicos que se ven masculinos tales como distribución, electricidad, fontanería, aire acondicionado, materiales de construcción y revestimiento, carpintería, logística de transporte o tareas administrativas”, detalla Aude Croiset.
“Hemos encontrado dificultades, por ejemplo, en obras donde a menudo las empresas de construcción están formadas por personal exclusivamente masculino. Nosotras tenemos la suerte de contar con equipos de confianza y ya no nos pasa tanto. Pero sí que a veces nos hemos encontrado en reuniones de obra en las que nuestra palabra tenía menos fuerza por el único hecho de ser una voz femenina. En esos momentos tenemos que romper prejuicios demostrando nuestra profesionalidad y creando buenas bases de trabajo”, afirma Céline Legros.
El equipo de Claaac aporta su evolución y aprendizaje al emprendimiento femenino apoyando a otras emprendedoras y participando en colectivos de mujeres profesionales. Aude y Céline son grandes defensoras de una mujer profesional, con las mismas posibilidades que los hombres y sin necesidad de ser súper-heroínas porque tienen que llegar a todo.