Perder peso, dejar de fumar, montar un negocio… ¿Por qué casi nunca cumplimos nuestros propósitos?
Únicamente el 4% de las personas han conseguido realizar cambios en sus vidas con deseos vagos, 10 veces menos que la gente que sí se plantea un deseo concreto y con sentido
Barcelona, 8 de julio de 2013.- Las mayoría de frases que más se escuchan en la actualidad son: me gustaría decir “no” más veces, me gustaría mejorar mi cuerpo, comer más sano, moverme más, mejorar mi relación de pareja, tener más seguridad y auto-confianza…Mikah de Waart, especialista en motivación personal y profesional, nos comenta el porqué de hacernos propósitos y casi nunca cumplirlos.
Mucha gente tiene el deseo de “algún día” ser más asertivo, encontrar la pareja ideal, dedicar más tiempo a la familia, etc…Si no marcamos un tiempo y una acción concreta, ese día puede que nunca llegue. Según Mikah de Waart, la realidad es que la mayoría de la gente sigue soñando hasta que ya no hay apenas tiempo para reaccionar. Tras observar los análisis del investigador John Norcross sobre el concepto “propósitos”, llegamos a la conclusión de que la gente no cumple con lo que se promete: aquellos que empiezan a principios de año con compromisos, tras 6 meses, han vuelto a sus hábitos antiguos. Después de 2 años, sólo 1 de cada 5 personas cumple con sus promesas. La cuestión está en que los buenos propósitos solos no ayudan, sino que se necesita algo más que una buena intención para cambiar algo en tu vida. Con sólo tener un deseo vago, únicamente el 4% de las personas han conseguido realizar cambios en sus vidas, 10 veces menos que la gente que sí se plantea un deseo concreto y con sentido.
Por otro lado, la conducta es el elemento clave entre tener planes y conseguir resultados. Si un deseo de cambiar no se traduce en una conducta concreta, necesaria para iniciar y conseguir el cambio, no tiene visos de mucha prosperidad. La clave está en describir específicamente lo que hoy tenemos que hacer para que, con el tiempo, se puedan obtener los resultados. Aunque lo difícil no es conseguir algo en la vida, sino cambiar la conducta que hará factible lograr el objetivo, es decir, el cómo actuamos, lo que decimos, lo que se percibe de nuestros actos en la sociedad…Normalmente cuesta meses y meses de repetición de esa conducta adecuada para ver los resultados, sobretodo, en las áreas más importantes de la vida: relación, crecimiento personal, salud, dinero, carrera profesional…”Romper o acabar con algo no suele ser tan difícil: te complicas una vez la vida y ya tienes los resultados al instante, pero conseguir resultados positivos casi siempre requiere una inversión a plazo medio”, comenta Mikah.
Acerca de – http://www.mikahdewaart.com/