El diseño responsive, un desconocido para muchas empresas españolas
El Mobile World Congress ha aterrizado estos días en Barcelona con gran éxito de empresas y público y es que un teléfono móvil ya no se utiliza sólo para hablar, su potencial es enorme y se está convirtiendo en un motor de cambio que afecta a nuestra forma de consumir y relacionarnos. Ahora somos seres interconectados las 24 horas del día.
Ante este nuevo escenario el diseño responsive alcanza una nueva dimensión. Las empresas tienen que entender que muchos de sus clientes llegarán a ellas a través de sus smartphones, por lo que no pueden presentar una web que no se adapte a estos dispositivos.
Las agencias de comunicación defienden que el responsive design no es ninguna moda pasajera pero, lamentablemente, son muchas las empresas españolas que no invierten en este tipo de acciones. Un ejemplo: tan solo dos de las empresas que cotizan en el Ibex 35 cuentan con webs que permiten su navegación desde cualquier dispositivo móvil.
Un dato llamativo si tenemos en cuenta que España es líder en penetración de teléfonos inteligentes, por lo que no se entiende que sus empresas no apuesten por la adopción de las últimas tecnologías web.
Gana la competencia
Cuando una compañía presenta una web que no está adaptada a las pantallas móviles, lo que está haciendo es abrirle la puerta a la competencia para que se quede con sus clientes. Hoy en día todo va a velocidad de vértigo, el usuario no tiene tiempo y no le gusta perderlo intentando visualizar una web, es más le desespera.
En el caso de las ecommerce este es un aspecto fundamental, porque no podrá vender si su usuario móvil no puede ver las características de sus producto o no puede hacer clic en el botón de añadir al carrito. Cuando esto ocurre, las marcas ven como sus clientes se alejan de ellas y buscan estos mismos productos o similares en la competencia.
La opción de la app
El coste de desarrollar un diseño responsive es más caro que el de crear un aplicación nativa, por ello algunas compañías optan por esta segunda opción a la hora de mejorar la usabilidad de su entorno web.
Los pros a la hora de optar por una app también afectan a la rapidez, ya que una web siempre tardará más puesto que debe cargar todos sus elementos. Por contra, una aplicación a medida no es universal, así que dependerá del dispositivo elegido será válido no.
Las agencias de comunicación abogan por la complementariedad de las dos opciones. Las apps mejorarán la experiencia del usuario móvil, mientras que las webs permiten que aquellos que conectan vía tablet, pc o televisión puedan hacerlo sin problemas.
Es importante tener en cuenta que cada vez existen más aparatos que se pueden conectar a internet, desde relojes hasta gafas y la lista seguirá creciendo en los próximos años. Por lo que las empresas deben planear sus diseños web pensando en el global de sus usuarios y no limitando su acceso en función del dispositivo elegido para conectarse.
Estamos ante un sector emergente que crece rápidamente y en el que queda mucho por hacer.