Los nuevos soportes ponen en riesgo la supervivencia del papel
Los soportes digitales permiten unificar textos, imágenes y vídeos, una posibilidad que atrae a los medios de comunicación, deseosos de aumentar su atractivo antes la caída de las ventas y de la publicidad. Además, los contenidos online gozan de una universalidad que pone muy difícil las cosas a la prensa escrita.
Las grandes estructuras de los medios de comunicación tradicionales se están volviendo insostenibles económicamente, mientras que el terreno digital, permite ampliar informaciones y mantenerlas actualizadas al minuto, con gran facilidad y apenas costes. Pero esto no tiene porque significar el fin del papel, en Agenciasdecomunicacion.org estamos convencidos de que si bien la prensa no puede competir con la inmediatez digital, sí puede transformarse en un entorno de reflexión y análisis, aportando valor añadido a la actualidad, contextualizándola y añadiendo datos relevantes que ayuden al lector a formarse su propia visión de lo qué está pasando.
Además está comprobado que ante hechos de máxima importancia, los ciudadanos acaban acudiendo a los medios de referencia, a los de toda la vida, por lo que no es cierto que ya no sean necesarios.
Obstáculos que ayudan a crecer
Sabemos que la inversión publicitaria en medios está cayendo en picado, mientras que en internet sube día a día. Este indicativo tiene que hacernos mirar a la red, si hay más anuncios es porque los usuarios están allí. Y las redes sociales se han convertido en canales de comunicación a los que acuden los ciudadanos para informarse.
Por ello es importante que la prensa potencie su marca, vinculada a un producto que sea único. Por ejemplo, el papel en Estados Unidos hace tiempo que se centra en las noticias locales y de proximidad, intentando aportar más datos, reflexión y cercanía como carta de presentación. Mientras que en Europa, existen diarios que cobran por sus aplicaciones mientras mantienen la web gratis. Son estrategias diferentes veremos cuál sobrevive.
Pero el reto de convertirnos en digitales no lo tienen sólo los medios de comunicación, toda marca que no entienda que hay que adaptarse a la era digital lo tendrá difícil, por no decir imposible, para sobrevivir. La clave está en volver a convertirse en un elemento esencial para la vida de los clientes.
Y respecto al futuro de la prensa hay que tener claro que depende de su capacidad de adaptación al mercado digital y no me refiero a ofrecer una copia online de la versión en papel porque eso sería un error. Sino a aprender a manejar estas dos realidades, aprovechando las cualidades de cada una y fomentando el dinamismo y la interactividad.