Qué pasos seguir cuando te copian un post de tu blog

 

Imagina que eres blogger, publicas diariamente contenidos en tu blog y en el de otros, y una de las veces que navegas por Internet te encuentras con la sorpresa de un artículo tuyo firmado con otro nombre. Aparte de enfurecerte y de sentir rabia, el mosqueo se engrandece porque recibes una penalización de Google. ¿Se puede poner peor la cosa?

Como sabemos hoy en día el contenido es el rey y dedicamos mucho tiempo a escribir buenos contenidos para posicionarnos, fidelizar a nuestra audiencia, aumentar la reputación, etc. Por lo que dedicamos horas y horas de trabajo a pensar en una buena idea, a documentarnos, plasmarla y ser lo más creativos posible, para que luego venga alguien y nos la robe.

Tengo que deciros que eso es lo de menos, porque si te han copiado es señal de que el contenido es bueno y relevante, por eso lo han copiado. Viéndolo de forma positiva, es una forma de reconocer tu trabajo. El problema viene cuando Google penaliza tu blog en lugar de penalizar al otro.

Y te preguntarás lo siguiente: si yo he publicado antes ese artículo, ¿por qué Google me penaliza? Por una simple razón. Si tu página tiene menor Page Rank que la otra (aunque tú hayas escrito el contenido original), tendrás todas las de perder.

Pero la cosa se pone peor cuando te das cuenta de que ha copiado exactamente todo, hasta las imágenes. Lo que quiere decir que ha usado hasta las mismas URLs de las imágenes y por consiguiente están consumiendo el ancho de banda de tu hosting.

Y, ¿qué pasos debemos seguir si nos copian?

1.       Contactar con el copiador

Lo primero que debes hacer es contactar con la persona por email y pedirle educadamente que elimine el post. Si no encuentras su email, intenta contactar por sus redes sociales de forma privada, explicándole que el contenido duplicado, Google no lo ve con buenos ojos y puede perjudicar a los dos. Debes hacerle entender que eso no está bien y pedirle que lo retire.

Se puede dar también el caso de que no contesten más a tus mensajes, y haga como si no hubieran visto tus comentarios, algo a veces difícil de creer si tienen sobre todo sus redes sociales muy activas.

2.       Intentar por todos los medios dejar claro quién es el autor real del contenido

Si el primer paso no da resultado, puedes avisar a sus lectores de que ese post es copiado y que tú eres el autor. Puedes hacerlo dejando un comentario debajo del post, a través de sus redes sociales de forma pública o vengarte de alguna forma si ha usado tus imágenes y está usando el ancho de banda de tu hosting.

3.       Denunciar a Google

Otra opción es denunciar a Google el caso como “una infracción de derechos de autor”. Tan solo tienes que rellenar un formulario donde te solicitan tus datos, la URL original, la copia y un comentario sobre la falta que se ha cometido.

4.       Contratar a un abogado

Como último recurso, si tienes un blog y dependes de él económicamente, es recomendable contratar a un abogado especializado en plagios de artículos y luchar por tus derechos y tu negocio. El plagio es un delito, es un tema serio y no se puede ir nadie de rositas.

 

Descripción del autor: Edith Gómez es editora en Gananci, apasionada del marketing digital, especializada en comunicación online. Se niega a irse a la cama cada noche sin haber aprendido algo nuevo. Le inquietan las ideas de negocio y, más aún, aportar una mirada creativa al pequeño mundo en el que vivimos.

Twitter: @edigomben