En el 2016 gestionar tu reputación digital de forma preventiva no defensiva
por Redacción
en Buenas prácticas
En el mundo online nos encontramos con que las pymes pueden competir de igual a igual con las grandes empresas, pero muchas lo hacen sin darse cuenta que al entrar en el mundo 2.0 se expondrán al criterio de los usuarios que podrán opinar sobre sus virtudes y sus defectos. Con esta afirmación no queremos sembrar el pánico, ni dar a entender que las pequeñas empresas no tienen su espacio en internet porque no es así, tan sólo queremos destacar que cuando una compañía entra en este terreno debe de ser consciente de su exposición y prepararse en consecuencia.
Una marca es mucho más que un logotipo o una página web, también forman su imagen todo aquello que los consumidores y trabajadores dicen de ella. En este sentido es importante que las empresas aprendan a gestionar su reputación digital o la dejen en manos de expertos para asegurarse que tanto en foros, blogs como en las redes sociales aparecerá ligada a connotaciones positivas y vinculada a los mensajes y valores que le interesan.
No podemos olvidar que ahora cualquier persona antes de comprar un producto acude a la red parta ver qué opinan los otros internautas sobre él. Las recomendaciones tienen un gran peso en el mundo digital y por ello las marcas deben de ser proactivas y planear estrategias para conseguir que los comentarios positivos brillen por encima de los negativos. En Agenciasdecomunicacion.org siempre subrayamos la necesidad de crear un plan de social media que vele por cuidar la reputación online de las marcas de forma preventiva, porque diseñarlo cuándo ya ha estallado la crisis no sólo acabará suponiendo un coste mayor para la empresa, sino también una gran inversión de tiempo puesto que revertir una imagen negativa no es algo que se consiga de la noche a la mañana, requiere de muchos meses.
Toda estrategia que tenga por objetivo cuidar de la reputación online de una marca debe dar los siguientes pasos:
• Vigilar qué se dice de la empresa en la red.
• Revisar las keywords y comprobar que no nos están vinculando a aspectos negativos que podrían dañar el posicionamiento de la web corporativa.
• Crear contenidos de calidad, únicos y demandados por los usuarios.
• Cuidar la imagen de la marca en las redes sociales: mantener los perfiles activos, responder a las dudas, solventar las quejas y adoptar en cada uno de ellos el tono y la actitud correspondiente.
• Fijar unos mensajes a lanzar en línea con los objetivos comerciales de la compañía pero que no afecten a la coherencia de su imagen.
• Captar la atención de bloggers e influencers que ayuden a difundir los mensajes de la marca de forma natural.
• Aparecer en los medios de comunicación como protagonistas de la noticia, no como publicidad. Así se conseguirá una notoriedad que aportará credibilidad a la compañía.
Si las marcas no consiguen generar una percepción positiva entre los usuarios estarán perdiendo la batalla digital y para evitarlo no hay más remedio que ser previsores y apostar por la profesionalización.