No comunicar, el error que no puede permitirse un emprendedor
Todas las empresas quieren aparecer en los medios de comunicación, crear una comunidad online y contar una imagen de marca que las posicione por delante de la competencia. El problema está cuando hablamos de pymes, micropymes y startups a las que el día a día no les deja tiempo para encargarse de estos aspectos.
Las agencias de comunicación explican que son muchas las pequeñas y medianas empresas que se ponen en contacto con ellas para arrancar una estrategia de comunicación, pero pocas las que acaban llevándola a buen puerto. El problema es que no entienden el valor de este tipo de servicio y por lo tanto para ellas nunca es prioritario.
Si una pyme no entiende qué es la comunicación y cómo le puede repercutir en su modelo de negocio, difícilmente podrá ni querrá invertir en ella. Algo que sin duda afectará a su consolidación y nivel de ventas.
Cercanía
Si el asesoramiento es básico, el perfil de la agencia también. No hay dos empresas iguales, cada una tiene sus necesidades y presupuesto y el reto está en localizar al profesional adecuado para cada caso.
No obstante, la mayoría de las pymes destacan que lo que buscan es sentir que su proyecto ha sido entendido, que las cuiden y a poder ser que aquél que las va a representar ante los medios se enamore de su proyecto. La pyme quiere sentirse especial, porque para ella su negocio lo es todo.
Guía
Un emprendedor no sólo necesita asesoramiento a la hora de diseñar un plan de comunicación, también necesita apoyo durante todo su desarrollo y análisis posterior. La agencia de comunicación tiene que convertirse en uno más del equipo, con una actitud proactiva y de lucha.
Como guía también es muy importante que el experto en comunicación sepa marcar prioridades y calendarizar acciones que casen con el presupuesto (siempre pequeño) de una pequeña empresa. La comunicación se puede hacer a medida y aquí es dónde se tiene que demostrar.
Es preferible poner en marcha pequeñas acciones pero constantes en el tiempo, que planificar un gran lanzamiento y que el resto del año no se vuelva a oír hablar de una marca. la memoria del consumidor es corta, hay que insistir para que nos retenga.