Seas una gran marca o una pyme vigila tu reputación online
por Redacción
en Buenas prácticas
La llegada de las nuevas tecnologías ha hecho que las marcas pierdan el control de lo que se dice de ellas. Ahora los usuarios también son generadores de opinión y no estamos hablando sólo de los consumidores, porque en este aspecto proveedores y competencia también tienen mucho que decir.
Los comentarios se difunden a grandes velocidades en las redes sociales, por ello todas las empresas, sea cuál sea su tamaño, deberían valorar y vigilar de cerca su reputación online. Las agencias de comunicación recuerdan que para asegurarse una buena imagen de marca ahora ya no basta con tener la web más moderna o hacer una campaña de publicidad potente. En la era 2.0, la reputación online de las compañías está en manos de los usuarios y ya no es un terreno limitado a las grandes marcas.
Gestión eficiente
Las agencias de comunicación están convencidas de que no existe una empresa que no necesite cuidar su imagen digital. Por ello es importante que las marcas sean conscientes de que el mundo on y offline van de la mano y lo que se afecte a uno repercute en el otro. Así que nada de crear estrategias de comunicación por separado, la integración es esencial para poder alcanzar los objetivos.
Unos fines que deben definirse antes de poner en marcha cualquier acción comunicativa, porque si no tenemos claro lo que se quiere conseguir y cómo se estarán dando palos de ciego y puede que confundiendo a nuestros seguidores. Para ello las agencias de comunicación recomiendan estudiar bien al público objetivo, averiguar en qué redes sociales se mueve y qué espera de la marca. Sólo así se le podrá ofrecer contenidos de calidad a través de las plataformas que ellos utilizan.
Por muy bien que una empresa haga las cosas es imposible contentar a todo el mundo. Así que es mejor aceptar desde un principio que los comentarios negativos llegarán y tener preparado un plan de acción para ponerles freno de la forma más rápida posible, pero siempre con respeto y sinceridad.
A evitar
Son muchas las empresas que por falta de tiempo, motivación o conocimientos acaban abriendo perfiles en Facebook, Twitter, etc. y al cabo de poco tiempo dejan de alimentarlos. Este abandono no está nada bien visto entre los usuarios que se sienten poco valorados por las marcas. Es preferible no tener cuentas corporativas a tenerlas en estas condiciones.
Otro error a evitar sería el de publicar sin una planificación o estrategia previa. Existen diversas herramientas que facilitan el control y la monitorización de nuestras acciones online, que nos ayudarán a decidir cuándo es el mejor momento para compartir un post, hacer un tuit o subir un vídeo.
En las redes sociales hay que ser constante y no dejar nada, o casi nada, en manos de la improvisación.