Directivos y empleados ya están preparados para decir adiós al correo electrónico
por Redacción
en Comunicados de Prensa
Aumentar la productividad laboral y el retorno de la inversión
Existe una clara transformación en las formas del trabajo y en la optimización del mismo, dando paso a las redes sociales corporativas como piedra angular de la comunicación, el talento y la colaboración
Muchas personas ya afirman que hay mejores maneras de comunicarse y mucho más rápidas que el email. De hecho, expertos en la materia anunciaron hace unos meses que el correo electrónico está prácticamente en las últimas, que es una pérdida de tiempo y, en consecuencia, de productividad.
Los directivos y los empleados más jóvenes han sido los que han empezado a despedirse del email en el trabajo y comenzado a sustituirlo por las redes sociales como herramienta de gestión, comunicación y colaboración en el entorno laboral. Los resultados del análisis llevado a cabo por la compañía Social Shared, pionera en optimización y gestión de proyectos para el entorno empresarial, revelan que existe una clara transformación en la forma de trabajar y en la optimización de esta, y explica que muchas empresas ya consideran las redes sociales corporativas como la nueva piedra angular de la comunicación, la colaboración y el talento.
“La forma de relacionarnos y comunicarnos en nuestro día a día ha cambiado”, asevera José Luis Sánchez, Cofundador y CEO de Social Shared, quien comenta que “lograr sentido de pertenencia y favorecer el clima laboral permite generar y compartir conocimiento y ayudarse mutuamente entre trabajadores, además de estimular sinergias y captar talento”.
Productividad y retorno de la inversión
El uso de esta nueva forma de comunicación favorece los resultados económicos de la compañía, aumentando la productividad de los empleados y la rentabilidad empresarial. Dichas redes sociales logran que se construyan equipos de trabajo muy productivos y participativos, logrando agilizar la gestión de los distintos proyectos y tareas de la empresa. Tal y como señalan desde Social Shared, el retorno de la inversión en una red social corporativa es elevado y los resultados se dejan ver de inmediato. “Se agilizan los proyectos y la comunicación, y la participación del cliente en la plataforma hace que la respuesta a sus necesidades y sugerencias sea inmediata”, explica Sánchez. El coste de implantación de estas redes es reducido y su uso, intuitivo.
Más información:
Social Shared es una herramienta segura, escalable y a medida. Con ella se tiene acceso a la última versión de cada documento, conectado a su proyecto o tarea correspondiente. La plataforma da una visión completa y detallada de la carga de trabajo de cada empleado, horas por tarea y proyecto, y permite el control de cómo cada miembro del equipo contribuye a la consecución de los objetivos.
Al mismo tiempo, permite añadir usuarios externos y elegir el nivel de privacidad e interacción con el resto. Se pueden incluir clientes a proyectos propios para mejorar la comunicación y ofrecer fluidez a la relación comercial.