Woffu supera el millón de euros de facturación en el primer semestre de 2019
- La startup de referencia en la optimización de la gestión del tiempo aumenta un 300% su facturación respecto al primer semestre del año anterior
- La compañía duplica su valor en seis meses llegando a los 130.000 euros de MRR habiendo generado durante el primer semestre el mismo volumen de negocio que en los últimos 4 años
Barcelona, julio de 2019.– Woffu, la empresa especializada en la gestión eficiente de las vacaciones, las ausencias y la presencia de los empleados ha superado este primer semestre del año todas las expectativas de crecimiento. Tras apostar por seguir mejorando su producto con el objetivo de cumplir rigurosamente con la nueva normativa española de control horario y, gracias a sus acuerdos estratégicos de canal, Woffu ha superado el millón de euros de facturación en el primer semestre de 2019. Esta cifra supone un aumento del 300% de la facturación respecto al mismo periodo del ejercicio anterior y de un 150% respecto a todo el año 2018, en el que la facturación fue de 715.000 euros.
La empresa ha inaugurado recientemente nuevas oficinas en Barcelona y ha pasado de tener 20 a 40 empleados en apenas 8 meses. Además del incremento de la plantilla, Woffu ha doblado también su MRR (Ingresos Recurrentes Mensuales) pasando de los 65.000 euros a cierre 2018 a los 130.000 euros a finales de junio 2019 generando el mismo volumen de negocio en 2019 que en los últimos 4 años y, consecuentemente doblando el valor de la compañía.
El éxito de la plataforma líder en la optimización del tiempo de los empleados no ha pasado inadvertido para las firmas internacionales de capital de riesgo, algunas de las cuales se han puesto en contacto con Woffu para mostrar su interés en acelerar el proyecto de la empresa a nivel europeo. A finales de junio nos comenta Miguel Fresneda, CEO de Woffu que “es muy probable que firmemos un préstamo participativo convertible con el fin de cerrar una ronda de financiación en los próximos meses”.
Woffu, que el pasado mes de mayo lanzaba el primer E-book con toda la información y consejos sobre la nueva Ley que obliga a las empresas a controlar la jornada laboral efectiva de los empleados, ha firmado recientemente acuerdos de canal con 25 distribuidores de software que le han proporcionado cerca de 400 clientes nuevos y situándose cerca de los 1.000 clientes.
“Desde Woffu vemos la nueva Ley como una oportunidad para todas las empresas de digitalizar definitivamente el tiempo de las personas. Es una necesidad integrar la presencia con la ausencia dado que son complementarias. Todos somos conscientes de que el activo más importante de las empresas son sus personas y el activo más importante de las personas es su tiempo. A nadie le gusta sentirse controlado, pero a todos nos gusta que se preocupen por nuestro tiempo. Al digitalizar el tiempo estaremos apostando por la transparencia y haremos más atractiva a la compañía. Los intangibles que percibimos son la reducción de la rotación de personal gracias al aumento de la transparencia alrededor de la variable “tiempo”; Aspiramos a un universo laboral sin fricciones. Además, estaremos ahorrando muchos recursos al integrar la presencia con la ausencia cumpliendo con la nueva normativa. Esperamos que este crecimiento que nos ha hecho autosuficientes nos permita seguir creciendo en otros países europeos dado que la tendencia legal es irreversible”, explica Miguel Fresneda, CEO y fundador de Woffu.
Woffu ayuda a las empresas, no solo a cumplir con la Ley de Control Horario, sino a gestionar la presencia, las ausencias, los turnos, y las vacaciones de los empleados, la gestión documental y la comunicación con un módulo añadido de informes que permite profundizar en el análisis de la realidad empresarial. A través de la plataforma online de Woffu las compañías pueden realizar gran parte de las gestiones que necesitan hacer en su departamento de Recursos Humanos (RRHH), ahorrando tiempo y recursos tanto a los profesionales de la gestión de personas como a los propios empleados que aprender a usarla sin formación con el fin de minimizar las posibles fricciones que pudieran surgir entre ambos.