¿Cambiará el concepto de periodista en el futuro?
La profesión periodística ha cambiado con la irrupción de las nuevas tecnologías, esto no podemos negarlo. Los medios de comunicación que no han sabido adaptarse al cambio han desaparecido, pero también han surgido otros que han triunfado porque han entendido que Internet ha venido para quedarse y hay que buscar la forma de adaptarse a esta nueva realidad, sacándole el máximo provecho.
Estamos ante un nuevo periodismo basado en la colaboración, porque ahora los ciudadanos tienen el poder de dar su opinión y relatar acontecimientos en primera persona, gracias a los dispositivos móviles. Las agencias de comunicación explican que si bien esta pluralidad de voces es positiva, también es importante que se subraye el papel que crítico debe ejercer el periodista a la hora de cribar las diferentes opiniones.
Además ahora la forma de relatar contenidos es mucho más rica y menos rígida o estática. Existen multitud de herramientas que el periodista puede utilizar para mostrar datos de una forma más atractiva e interactiva.
Ética
Como hemos dicho, ahora los periodistas cuentan con muchas fuentes de información y se enfrentan al reto de saber leer e interpretar estos contenidos, filtrarlos, darles forma y contextualizarlos. Porque la ética y la responsabilidad del comunicador es la misma, sólo ha cambiado su forma de trabajar.
Podríamos decir que las redes sociales nos han permitido volver al periodismo de siempre, al de la calle. Un cambio de actitud que se ha producido antes la necesidad de llegar a nuevas audiencias. Un reto que exige una rapidez que antes era impensable, pero eso es debido a la necesidad de ampliar y actualizar las informaciones online.
La obsesión de los medios siempre ha sido llegar los primeros y en la era 2.0 este objetivo ha cogido más fuerza, lo que no tiene que provocar una disminución del análisis informativo.
Financiación
Las cifras no engañan las cabeceras pierden a diario lectores que se pasan a las versiones online, debido a su gratuidad pero también a su facilidad de consumo. Los dispositivos móviles permiten consultar cualquier medio las 24 horas del día y esta situación ha sembrado más dudas aún sobre el modelo de financiación de los medios de comunicación.
Algunos grupos ya se han empezado a decantar por los muros de pago, aunque este es un movimiento muy incipiente que habrá que seguir de cerca para ver sus resultados. No obstante, lo que está claro es que los medios de comunicación tienen que encontrar la fórmula para hacer entender a su audiencia que la calidad tiene un precio, sin limitar el acceso a la información.