¿Cómo ser un buen portavoz para mi empresa?
Si has tenido una idea de negocio, la has llevado a cabo y te falta colocar la guinda del pastel, tienes que apostar por la comunicación. Los mensajes que lances tienen que ir más allá de tus trabajadores, hay que tener presencia en los medios, ganar visibilidad y cuando esto ocurra vas a necesitar un portavoz que los transmita.
Hay muchas agencias de comunicación que ofrecen servicios de formación de portavoces. Ellas te enseñarán las mejores técnicas para realizar una comunicación eficaz. Con un buen asesoramiento podrás hacer frente a preguntas incómodas o transmitir a tus empleados cambios de estructura o de gestión.
Portavoz sí, un robot no
Es esencial que un portavoz despierte empatía, es decir tiene que mostrarse riguroso sin ser pomposo, convincente a la vez que cercano, dispuesto a colaborar y por encima de todo creíble. Un portavoz no es un robot que repite una y otra vez un discurso ensayado, tiene que ser natural y nunca puede quedarse callado por muy inoportuna que sea la pregunta.
Reglas de oro
-Transmitir mensajes claros y directos a través de lenguaje sencillo y atractivo. Nos tiene que entender todo el mundo. Es importante no saturar a nuestros interlocutores con demasiada información.
-Ser sincero. Si no sabes la respuesta no la inventes, reconoce que la desconoces y ofrécete a averiguarla lo antes posible. Si pierdes la credibilidad no tendrás futuro, no olvides que en tus manos está la imagen corporativa de una empresa.
-Evitar las palabras o mensajes negativos y si hay que dar malas noticias, acompáñalas de soluciones o de otras iniciativas positivas que amortigüen el golpe.
-Relajate, eres el experto, el que mejor conoce a la empresa, no te van a preguntar nada que no sepas, confía en ti.
-Ante la prensa, no bajes la guardia ni caigas en el amiguismo, respetando siempre al profesional que está al otro lado.
Su rol de puertas para adentro
Recuerda que un portavoz no sólo ejerce cuando le ponen un micrófono delante, su presencia también será necesaria en actividades no mediáticas como reuniones internas con empleados, directivos, accionistas o clientes. El portavoz es una pieza clave en la gestión de la comunicación interna de una empresa.